EL MUNDO SE HA VUELTO LOCO POR EDUARDO OWEN

 

A mi alrededor,

Se desploman los muros,

Las casas se caen de sus cimientos,

Algunas dueñas de casa enajenadas

Salen a regar sus jardínes bajo la lluvia,

Descalzas,

Sin delantales,

Sin mangueras ni regaderas,

 

Todo es caos,

El silencio escasea,

Los que pueden correr corren,

Los que no pueden correr

Empujan sus sillas de ruedas

O se cuelgan de sus muletas,

(los bastones sublevados

se convierten en ramas

de eucaliptos,

que se niegan

a pertenecer a un árbol),

 

No se que sucede bajo el suelo,

Las raíces de los árboles

Están inquietas,

Están perdiendo sus pelos radicales,

Las ramas deshojadas por el otoño

No quieren mostrar sus mejillas de madera,

 

El mundo se ha vuelto loco,

Todo lo que veo y escucho no tiene sentido,

No puedo caminar sobre las veredas,

Que no dejan de moverse

Al ritmo del agua de lluvia

Que corre por las canaletas,

Quisiera sentarme

Pero mis piernas se oponen,

(mis zapatos,

rebeldes,

se niegan a dar un paso),

Las calles están vacías de coches,

 

Finalmente,

Después de que el anochecer se quedara ronco

De tanto gritar groserías en ruso,

La paz de la mudez

Acaba de regresar a mi barrio :

 

Le he pedido a mi lecho

Que me abrace por unas horas,

(hasta que regrese la aurora

nuevamente a rescatarme…)

 

Eduardo Owen